El Ministerio de Salud de Perú estima que 7 % de las 30,000 personas diagnosticadas anualmente con TB son niños. Diego es uno de ellos. Él sufre de Mal de Pott, una forma de tuberculosis que se extendió a sus huesos y columna vertebral. Esta enfermedad ya inmovilizó sus miembros inferiores y poco a poco va consumiendo todo su cuerpo.
No obstante, hasta hace un año, Diego como todo niño de su edad jugaba con sus hermanos y ayudaba a su familia en la agricultura. Por motivo de pobreza y salud dejo de estudiar. Los fuertes dolores en la columna e hincones al sentarse, imposibilitaba su andar. A causa de este dolor, sus padres deciden llevarlo al centro de salud más cercano a su comunidad, pero su situación ya estaba muy avanzada y el personal de salud decide trasladarlo a Lima para ser evaluado por especialistas.
Cuando Diego empezó con los dolores de espalda y dificultad para caminar, el bacilo de la TB ya se había diseminado por la columna a través de la sangre, causando fuertes dolores, adormecimiento en los miembros inferiores y una leve deformación en su columna vertebral.
Hoy, Diego recibe tratamiento especializado por el Ministerio de Salud; sin embargo como suele suceder en estos casos, la enfermedad también afecta a la familia y causa angustia a los padres que además de atender a Diego deben velar por los otros siete hermanos. Para el padre de Diego cada día es un reto. El estar lejos de su familia, no es fácil; sus otros hijos necesitan atención y la situación familiar es apremiante. Su preocupación es comprensible, tener un niño postrado en cama, estar lejos de su familia, no tener un trabajo y atender la demanda familiar es un reto que debe afrontar. Sin embargo, Diego y su padre no se rinden. Ambos luchan contra la enfermedad. Ellos están dispuestos a dar todo de si y tú puedes ayudarlos.
Diego necesita un colchón anti-escaras (especial para personas postradas), crema para las escaldaduras, pañales para adulto talla S, entre otros gastos que el padre debe afrontar. También el padre busca un trabajo que le permita tener ingresos aquí en Lima mientras atiende a su hijo.
Te invitamos a ver y compartir estas motivadoras historias.